OLED, LA TECNOLOGIA DEL FUTURO

Hoy me dirijo a vosotros para escribir sobre un material que ha revolucionado el mundo tecnológico multimedia desde el punto de vista que lo conocemos, el OLED. Se trata de un diodo que se basa en una capa electro-luminiscente formada por una película de componentes orgánicos que reaccionan a una determinada estimulación eléctrica, generando y emitiendo luz por sí mismos.

En otras palabras, podríamos definirlo como una pantalla extrafina y flexible, con más contrastes y brillos, mayor ángulo de visión, menor consumo… que nos permite emplearlo en multitud de aplicaciones. No me detendré en los materiales por los que está compuesto pero sí remarcaré que se tata de un material en pleno desarrollo y, por lo tanto, no iban a ser todo ventajas. A pesar de las propiedades nombradas anteriormente, nos encontramos con materiales que se degradan con facilidad, por lo que su evolución se ha visto interrumpida. Aunque creo que el mayor inconveniente con el que se enfrentan los investigadores es que tiene un corto periodo de vida.

Pero para que os hagáis una idea de lo que puede llegar a significar la plena evolución de este producto podríamos hablar del futuro sustituto de las actuales televisiones de LCD, pensaréis que la calidad de la imagen es casi inmejorable pero, ¿y si  a eso le añadimos que la televisión apenas consume y es flexible?. Habéis leído bien, flexible. Con este material no nos tendremos que preocupar en adaptar un espacio para la televisión ya que ésta se adaptará a nuestro espacio. Y menos por su peso ya que el OLED es un material ligero y difícil de romper.

Si nos referimos al OLED en el campo automovilístico, podríamos estar hablando de techos sensibles según la cantidad de luz que reciba; pantallas de información en la luna delantera que permitan una mayor visibilidad y seguridad al volante…

Y ya, como aplicación a la vida cotidiana, las aplicaciones serían infinitas: dado a su flexibilidad podríamos encontrar publicidad en los postes de farolas o paredes con multitud de formas; ventanas transparentes que por la noche se conviertan en paneles luminosos… y todo lo que se os pueda ocurrir.

Para finalizar, estamos frente a un material «joven» pero cuya maduración supondrá la revolución en el mundo tecnológico en no más de 5 años, dado a la gran velocidad con la que se descubren nuevas implementaciones y mejoras a la tecnología actual.

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